VIDEOJUEGOS DE INGENIERÍA. JELLY TOWER FOUR SEASONS.

Último día del año y última entrada del año. Una vez más voy a hablar sobre un videojuego relacionado con el mundo de la ingeniería. Jelly tower four seasons, es el nombre de dicho juego y consiste en construir torres hasta determinados puntos colocados a distintas alturas. A primera vista parece un juego creativo, ¿lo será?

Nada más empezar vemos que tenemos un total de 12 niveles repartidos en cuatro tandas (primavera, verano, otoño e invierno, las estaciones del título). En el primer nivel tenemos además el tutorial, que no explica como jugar en apenas unos segundos. Y es que una característica de este juego es su extrema sencillez.

Tenemos que construir torres hasta una determinada altura. Para ello no disponemos de más materiales que la madera. A la hora de construirla no colocamos las vigas ni los pilares, únicamente colocamos los nodos y estos se unen automáticamente al resto de nodos si están lo suficientemente cerca. Un método muy intuitivo con todo lo bueno y malo que ello conlleva.

La altura a alcanzar esta marcada con un punto. Punto en el que debe ir el último nodo. Así empezamos a levantar nuestra construcción hasta llegar al punto indicado y colocar un nodo que aguante el tiempo suficiente para que se enganche.

Una vez hecho esto ya dominamos el juego, porque lo cierto es que no hay muchas novedades en el desarrollo. Simplemente, cada vez que avanzamos de nivel aumenta la dificultad, y este aumento se debe al incremento de altura y el de numero de puntos (checkpoints) a los que debe llegar la estructura.

De este modo construiremos torres cada vez más altas, cuidando que no vuelquen al intentar alcanzar los checkpoints laterales. Para esto debemos tener en cuenta que cada checkpoint que alcancemos actuara como punto fijo de la torre, lo que facilitara la tarea.

Centrándonos en el aspecto ingenieril, podemos construir las torres con cuidado guardando las proporciones y pensando bien cada punto para hacer algo que se parezca a una torre y gastando el mínimo de material posible.

Por desgracia el juego da suficiente material para empezar a poner nodos sin parar y alcanzar los objetivos sin pensar apenas, lo que aumenta demasiado la facilidad. Algunos de los engendros que se pueden construir los podéis ver a continuación.

En definitiva un juego con poca variedad y escasa dificultad en la mayoría de sus niveles, que no despierta el ingeniero friki que hay dentro de nosotros.

Hasta la próxima entrada y feliz año nuevo.